Orden ejecutiva
Las órdenes ejecutivas (en inglés, executive orders), también llamadas órdenes presidenciales, decretos presidenciales, ordenamientos presidenciales u ordenanzas ejecutivas, son disposiciones dictadas por el Presidente de los Estados Unidos que administran las operaciones de la rama ejecutiva del gobierno federal.[1]


Las órdenes ejecutivas pertenecen al derecho administrativo, pero tienen fuerza de ley únicamente cuando se sustentan en las facultades ejecutivas otorgadas directamente al Presidente de los Estados Unidos por la Constitución (artículo II), o se dictan conforme a leyes del Congreso que explícitamente delegan en el presidente cierto grado de poder discrecional (legislación delegada).[2]
Al igual que los cuerpos legales y los reglamentos promulgados por organismos gubernamentales, las órdenes ejecutivas están sujetas a la revisión judicial y pueden ser dejadas sin efecto si los tribunales consideran que su contenido no está conforme a la ley o la Constitución. Las principales iniciativas políticas requieren de la aprobación por el poder legislativo, pero las órdenes ejecutivas tienen una influencia significativa en los asuntos internos de gobierno, decidiendo cómo y en qué medida la legislación será aplicada, enfrentar situaciones de emergencia, librar guerras, y en general, el ajuste fino de las opciones de políticas en la implementación de las leyes de contenido amplio.
Historia
Véase también
Referencias
- The U.S. National Archives and Records Administration. «FAQ's About Executive Orders - Federal Register» (en inglés). Consultado el 9 de febrero de 2017.
- John Contrubis, Executive Orders and Proclamations, CRS Report for Congress #95-722A, March 9, 1999, Pp. 1-2
- Gerhard Peters. «The American Presidency Project / Executive Orders» (en inglés). Consultado el 26 de agosto de 2015.
- «Executive Orders». Federal Register. Consultado el 10 de noviembre de 2016.