Sergi Gordo Rodríguez

Monseñor Gordo Rodríguez nació en 1967 en Barcelona y a los 14 años ingresó en el Seminario Menor de Barcelona. Después cursaría estudios eclesiásticos de Teología y Filosofía en el seminario mayor de la misma diócesis y en la Facultad de Teología de Cataluña.

Fue ordenado sacerdote el 14 de junio de 1992, obteniendo a los dos años la licenciatura de Filosofía por la Universidad Ramon Llull de Barcelona, donde también cursó el bienio de doctorado en Filosofía. De 2001 al 2004 amplió estudios en Lengua y Filosofía en Múnich.[2]

Ha sido sacerdote adscrito en varias iglesias de su diócesis: la de Santa María y la de la Santísima Trinidad de Villafranca del Panadés. También fue formador del seminario menor diocesano entre 1992 y 2001; colaborador de la delegación episcopal para la Vida Consagrada como encargado de las relaciones con los Institutos Seculares (de 1997 a 2005); y profesor de la Facultad eclesiástica de Filosofía y del curso propedéutico (introductorio) del seminario mayor barcelonés (1998-2017).

Ha sido canciller de la curia y secretario general del arzobispado de Barcelona y secretario de la provincia eclesiástica de Barcelona (desde 2004); canónigo y miembro del consejo presbiteral, del colegio de consultores y del consejo pastoral diocesano (desde 2009); consiliario diocesano del Movimiento de Profesionales Católicos de Barcelona (desde 2011) y miembro del patronato de la Fundación para la construcción de la basílica de la Sagrada Familia (desde 2017).[3] También es profesor de la Facultad de Filosofía y del ISCREB (Instituto Superior de Ciencias Religiosas) en las especialidades de Historia de la Filosofía Antigua y también de Fenomenología de la Religión.[4] Habla varios idiomas.

El 19 de junio de 2017 la Nunciatura Apostólica hizo público su nombramiento por parte del papa Francisco como obispo auxiliar de Barcelona, junto al sacerdote mallorquín Antoni Vadell Ferrer.[5] Se le ha asignado la sede titular de Cene.[6]

El 9 de septiembre se celebró la consagración episcopal conjunta de ambos prelados en la basílica de la Sagrada Familia. El arzobispo de Barcelona, Juan José Omella ejerció como consagrante principal.[7]