Botas de siete leguas

Las botas de siete leguas son un elemento del folclor europeo. Las botas permiten a la persona que las lleva el tomar pasos que recorren siete leguas cada uno, lo que resulta en una gran velocidad. Las botas a menudo son presentadas por un personaje mágico al protagonista para ayudar en la realización de una tarea importante.

Pulgarcito usando las botas de siete leguas

Etimología

El concepto de las botas de siete leguas fue inicialmente popularizado por los cuentos de Charles Perrault con el término francés "bottes de sept lieues".[1] Se creía que la legua francesa (lieue), de aproximadamente 4,8 kilómetros, representaba la distancia recorrida en una hora por un hombre promedio. Si un hombre debía caminar 7 horas por día, entonces caminaría 7 leguas diarias, o cerca de 34 kilómetros.

Véase también

Referencias

Enlaces externos

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